
Que el PSOE y el PP estarían de nuevo empatados, que Mariano Rajoy es un mal candidato para el PP y que Esperanza Aguirre sería peor, son los mensajes que nos lanzó EL PAIS con la encuesta de Metroscopia del día 1 de noviembre, y ahí situó la idea de que sólo Alberto Ruiz Gallardón sería capaz de ganarle las elecciones a Zapatero.
Contextualizada así la difusión de los datos del barómetro de octubre del CIS, realizado con anterioridad, cualquier estimación de la intención de voto que ofreciera nacería anticuada. Y así sucedió, los periodistas descontaron los 3,3 puntos de ventaja del PP que certificaba el CIS, en la lógica de la situación de empate descrita por EL PAIS, concluyendo que la información más relevante de este barómetro es que los políticos, percibidos como problema, preocupan en octubre al 13,3% de los españoles con derecho a voto, frente al 12,0% registrado en el mes de julio. Asombroso. Este barómetro de octubre contiene verdaderas noticias que no vemos publicadas y exponemos a continuación.
La primera de ellas es que Unión Progreso y Democracia (UPyD), con 1,3 millones de votos, el 3,8% sobre censo y el 5,3% de los votos válidos (1,6 puntos más de lo que afirma el CIS), se consolida con toda claridad como tercera fuerza política nacional.
La primera de ellas es que Unión Progreso y Democracia (UPyD), con 1,3 millones de votos, el 3,8% sobre censo y el 5,3% de los votos válidos (1,6 puntos más de lo que afirma el CIS), se consolida con toda claridad como tercera fuerza política nacional.
De celebrarse ahora elecciones generales, UPyD llevaría a las urnas a sus 300.000 votantes del año 2008 y además, otros 325.000 procedentes del PSOE, 275.000 del PP, 250.000 de otros partidos y 185.000 abstencionistas como ingresos más significativos. Según las edades de los electores, UPyD superaría el 5% sobre censo entre los votantes de hasta 34 años, (456.000 votos), el 4% entre los de 35 a 49 años, (486.000), el 3% entre los de 50 a 69 años (281.000), y hacia el 1,7% entre los de 70 o más años de edad (98.000). UPyD obtendría sus mejores resultados en la mitad más joven del censo y además en el hábitat urbano, lo contrario que el PSOE y el PP.
Y a nada que se estudie este fenómeno, se concluye que el 5,3% de los votos válidos que obtendría UPyD en España implica necesariamente posiciones cercanas al 10% en comunidades como Asturias, o La Rioja, pero superiores en Madrid o en provincias como Guadalajara. Estos datos de intención de voto se complementan con un posicionamiento izquierda-derecha óptimo de los magenta, y además coincidente con el de los electores más moderados del PSOE y del PP. Que su líder nacional, Rosa Díez figure entre los políticos más valorados en este estudio ya no es noticia, ella suele encabezar las listas de popularidad en las encuestas.
El segundo titular de este barómetro de octubre del CIS sería que, por primera vez desde que gobierna Zapatero, el PP aparece por delante del PSOE en datos directos de intención de voto. Este hecho, que parece haber pasado desapercibido, es sintomático de una profundización en la tendencia bajista del PSOE. La sensación social es que las elecciones generales las ganaría hoy el PP, mejor capacitado que el PSOE para gestionar la economía española, respuesta contundente de los entrevistados a otra de las preguntas de este estudio. El PP, con 10,7 millones de votos, permanecería en su habitual el 30% sobre censo total, el 42,1% de los válidos y ganaría las elecciones generales con 6,1 puntos de ventaja sobre un PSOE situado en 9,2 millones, el 36,0% de los votos válidos. El retroceso del PSOE en su posición sobre censo (26,0%), es de -6,2 puntos respecto a las elecciones generales del año 2008 (32,2%).
Los socialistas perderían un total de 2,9 millones de sus electores del año 2008: 741.000 votarían ahora al PP, 377.000 a IU, 325.000 a UPyD y 195.000 a CIU como fugas más significativas, y se dejarían algo más de 1 millón de sus votantes en la abstención. Sus ingresos serían irrelevantes salvo el refuerzo de 528.000 abstencionistas típicos de izquierda.
Se puede concluir que el PSOE habría perdido la confianza del 35% de sus electores más moderados, con intención de votar ahora al PP o a UPyD, y que además, estaría defraudando a otros electores que llamamos de izquierda, y devolviendo los votos nacionalistas que consiguió agrupar en el año 2008 para evitar la victoria del PP. Estas son las otras noticias que nos trae del barómetro de octubre del CIS, las que no vemos publicadas.
Y a nada que se estudie este fenómeno, se concluye que el 5,3% de los votos válidos que obtendría UPyD en España implica necesariamente posiciones cercanas al 10% en comunidades como Asturias, o La Rioja, pero superiores en Madrid o en provincias como Guadalajara. Estos datos de intención de voto se complementan con un posicionamiento izquierda-derecha óptimo de los magenta, y además coincidente con el de los electores más moderados del PSOE y del PP. Que su líder nacional, Rosa Díez figure entre los políticos más valorados en este estudio ya no es noticia, ella suele encabezar las listas de popularidad en las encuestas.
El segundo titular de este barómetro de octubre del CIS sería que, por primera vez desde que gobierna Zapatero, el PP aparece por delante del PSOE en datos directos de intención de voto. Este hecho, que parece haber pasado desapercibido, es sintomático de una profundización en la tendencia bajista del PSOE. La sensación social es que las elecciones generales las ganaría hoy el PP, mejor capacitado que el PSOE para gestionar la economía española, respuesta contundente de los entrevistados a otra de las preguntas de este estudio. El PP, con 10,7 millones de votos, permanecería en su habitual el 30% sobre censo total, el 42,1% de los válidos y ganaría las elecciones generales con 6,1 puntos de ventaja sobre un PSOE situado en 9,2 millones, el 36,0% de los votos válidos. El retroceso del PSOE en su posición sobre censo (26,0%), es de -6,2 puntos respecto a las elecciones generales del año 2008 (32,2%).
Los socialistas perderían un total de 2,9 millones de sus electores del año 2008: 741.000 votarían ahora al PP, 377.000 a IU, 325.000 a UPyD y 195.000 a CIU como fugas más significativas, y se dejarían algo más de 1 millón de sus votantes en la abstención. Sus ingresos serían irrelevantes salvo el refuerzo de 528.000 abstencionistas típicos de izquierda.
Se puede concluir que el PSOE habría perdido la confianza del 35% de sus electores más moderados, con intención de votar ahora al PP o a UPyD, y que además, estaría defraudando a otros electores que llamamos de izquierda, y devolviendo los votos nacionalistas que consiguió agrupar en el año 2008 para evitar la victoria del PP. Estas son las otras noticias que nos trae del barómetro de octubre del CIS, las que no vemos publicadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario